Siempre queda algo por hacer en Madrid en cuestión de obras -un túnel, un rascacielos o una reforma de lo ya construido- y el año que viene no iba a ser menos. En la ciudad ‘inacabada’ empezarán a cobrar forma otros tantos proyectos urbanísticos que buscan cerrar brechas arquitectónicas e incluso ampliar la ciudad mediante el desarrollo de nuevos barrios. Entre las ideas que empezarán a ver la luz en 2024 están la prolongación del soterramiento de la A-5 y el cubrimiento de la M-30 a la altura de Ventas, junto con las reformas de AZCA y en el eje Prado-Recoletos. Pero todavía hay más por venir: la construcción de las 1.000 primeras viviendas en Los Berrocales, la Ciudad de la Justicia…
Con el aval del Pleno municipal a las cuentas para 2024 que hace unos días asignó de manera definitiva un 9,9% más de presupuesto al área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, la ciudad de Madrid tiene previsto iniciar durante el ejercicio 2024 la tramitación de dos de los grandes proyectos urbanísticos que cambiarán, otra vez, la fisonomía de la ciudad y, como ya sucedió con la construcción de ‘Madrid Río’, será de nuevo en torno a la M-30. De hecho, uno de ellos consistirá en cubrir la parte de esta vía de circunvalación urbana a la altura del Puente de Ventas, lo que permitirá que el distrito de Salamanca y el de Ciudad Lineal queden unidos a lo largo de 300 metros al sur del puente y crear también 20.000 m2 de zonas verdes. El presupuesto municipal para 2024 destina 1,85 millones a este concepto y 30 y 33 millones en los siguientes dos ejercicios.
Sin alejarse mucho de la Calle 30, pero en su tramo suroeste esta vez, la antigua carretera de Extremadura seguirá desapareciendo bajo la piel de la capital con la siguiente fase de soterramiento de la A-5 en el tramo que discurre por el término municipal de Madrid. Esta segunda actuación, denominada ‘paseo Verde del Suroeste’ será bastante más extensa ya que pretende recuperar para la ciudad el espacio que ahora ocupan unos tres kilómetros de la citada A-5, desde la Casa de Campo hasta el entorno de Puerta del Ángel y Madrid Río. En concreto, supondrá ampliar la zona peatonal ya creada en 2007 en la avenida de Portugal que ahora llegará hasta la altura de la avenida Padre Piquer. De esta forma, los barrios de Lucero y Aluche, en el distrito de Latina, volverán a quedar unidos después de 1968. El Ayuntamiento ha anunciado la licitación de ambos proyectos a lo largo del primer trimestre de 2024. De momento, este segundo proyecto tiene una asignación para el próximo año que supera los 7 millones de euros, a los que se sumarán 410 millones más hasta 2028, por lo que será la mayor obra que el Consistorio acometa a corto plazo.
Inversiones en torno a ‘Madrid Nuevo Norte’
También debería empezar a redactarse el año que viene anteproyecto para soterrar el tramo norte del paseo de la Castellana entre el complejo Cuatro Torres Business Área y su confluencia con el Hospital de la Paz, una zona que ahora apenas cuenta con dos pasos peatonales. El Ayuntamiento invertirá 130 millones de euros en esta obra hasta 2027, con una primera partida de 2,3 para 2024.
A su vez, esta actuación guarda relación con el proyecto ‘Madrid Nuevo Norte’ que ha empezado a ejecutarse este mismo año y en los presupuestos de la ciudad para 2024 hay una partida relacionada con él: la conexión entre la M-40, M-607 y M-603 en el nudo de Fuencarral. La primera partida es de 200.000 euros, pero hasta la finalización prevista en 2029 hay consignados más de 190 millones en total.
Los ambiciosos proyectos urbanísticos de Madrid para 2024
El Gobierno local afronta en 2024 el primer año completo -y los primeros presupuestos- de su legislatura iniciada el pasado mes de mayo con una lista de grandes proyectos urbanísticos que, además de la movilidad, se dirigen a otros capítulos como la vivienda o la remodelación de algunos espacios urbanos emblemáticos. Este es el caso de otro par de proyectos: el primero de ellos tendrá como escenario la ‘Asociación Zona Comercial A’, más conocida por el acrónimo AZCA, el primer distrito financiero y de negocios de Madrid que empezó a construirse a finales de los años sesenta del siglo pasado.
Más allá de los ligeros retoques que ha recibido a lo largo del tiempo, la reforma integral de sus 20 hectáreas ha estado encima de la mesa en varias ocasiones en los últimos años; la última fue en 2021 cuando la iniciativa privada creó Renazca S.A. -detrás estaban Merlin Properties, GMP, Monthisa, Corporación Financiera Alba y Cajamar Mapfre, entre otras- en el marco de un modelo de reforma y explotación de este ámbito en régimen de concesión. Aunque finalmente se desestimó por limitaciones urbanísticas y medioambientales, ahora es el Ayuntamiento el que se ha comprometido a iniciar un diálogo con todas las partes implicadas que permita elaborar un proyecto viable bajo la misma fórmula de colaboración público-privada. Eso sí, el Área de Obras y Equipamientos será quien asuma la ejecución de los trabajos necesarios. En 2024 debería llegar el proyecto definitivo para la remodelación completa de AZCA.
Desde hace dos años, el entorno denominado oficialmente ‘El Paseo del Prado y el Buen Retiro, Paisaje de las Artes y las Ciencias’ y conocida también como ‘Paisaje de la Luz’ forma parte de la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco en la categoría de Paisaje Cultural. Incluye el Paseo del Prado, el barrio de los Jerónimos y los Jardines del Buen Retiro. Al mismo tiempo, alberga el principal eje museístico de la ciudad con tres grandes pinacotecas. El año pasado, el Gobierno anunció una inversión de 15,2 millones para acometer distintas mejoras que deberían iniciarse en 2024 en tres frentes: las fachadas del Palacio de Velázquez, de los edificios Sabatini y Nouvel del Reina Sofía y el acceso a los mismos por la calle Hospital. Sin embargo, estas podrían no ser las únicas obras que se ejecuten en la zona. Ya en 2021, el alcalde de Madrid anticipó que la reforma del eje Prado-Recoletos, la principal vía que atraviesa el ‘Paisaje de la Luz’, era “el siguiente gran reto” de Madrid, tras inaugurar la remodelación de Plaza de España y, aunque no dio más detalles, regidores anteriores habían propuesto medidas como soterrar dicha vía para recuperar espacio peatonal.
Nuevos barrios y equipamientos judiciales
Los principales proyectos urbanísticos de Madrid para 2024 son también ambiciosos en cuanto a la vivienda. La promesa del actual equipo de gobierno es que se construyan 12.000 viviendas en la presente legislatura y para conseguirlo hará falta, entre otras cosas, agilizar la concesión de licencias y otros trámites administrativos. Esto es lo que ha hecho el Ayuntamiento al permitir simultanear las obras de urbanización -cuyo coste se estima en 782 millones de euros- y edificación en el barrio de Los Berrocales, dentro del distrito de Vicálvaro.
La primera etapa contempla la edificación de unas 1.125 viviendas de las 4.500 previstas, aunque este desarrollo urbanístico contará con 22.500 viviendas en total cuando alcance su máximo desarrollo.
La cifra oficial de inversión que requerirán los equipamientos e infraestructuras públicos y privados incluidos en este proyecto supera los 5.200 millones de euros. El consistorio asegura haber hecho las reformas urbanísticas y normativas necesarias para desbloquear otros desarrollos al sureste de la capital que, en el caso de Los Berrocales, se diseñó en 2006, pero después ha estado ‘empantanado’ por diversos procesos judiciales y burocráticos.
Otra de esas ideas que se erigió en tiempos de la burbuja inmobiliaria y que con la misma rapidez se vino abajo es la que encarna la ‘Ciudad de la Justicia’, el intento de unificar las principales sedes judiciales de la región para unificar servicios y evitar, además, los altos alquileres de la capital.
Este año la Comunidad de Madrid ha resucitado el proyecto que prevé una inversión de 660 millones de euros hasta 2030 y la construcción de más de una decena de edificios: los primeros serán las nuevas sedes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) y de la Audiencia Provincial de Madrid, así como un centenar de juzgados de Primera Instancia.
Esta iniciativa incluye, además, la prolongación de la Línea 11 de Metro y la creación de un gran intercambiador de transporte en Valdebebas, el barrio en el que estará ubicado el complejo judicial. La primera fase debería iniciarse a principios de 2025 con la urbanización perimetral.
